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Comparte “Can't Dance”, de su nuevo álbum Sad Girl.

TSHA presenta hoy “Can't Dance”, el más reciente adelanto de su esperado nuevo álbum Sad Girl, que se lanzará el 27 de septiembre en Ninja Tune. “Can't Dance” recuerda las guitarras R&B de Craig David, integrando a Master Peace con una atrevida melodía drum 'n' bass inspirada en las 

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TSHA presenta hoy “Can't Dance”, el más reciente adelanto de su esperado nuevo álbum Sad Girl, que se lanzará el 27 de septiembre en Ninja Tune. “Can't Dance” recuerda las guitarras R&B de Craig David, integrando a Master Peace con una atrevida melodía drum 'n' bass inspirada en las fiestas escolares donde la gente se aferraba tímidamente a las paredes.

La letra de la canción surgió inicialmente a través del trabajo de TSHA con el cantante, compositor y actor Raleigh Ritchie, también conocido como Jacob Anderson, quien es más reconocido por su papel en la serie de televisión Game of Thrones como 'Grey Worm'.

“Me encanta la letra, porque me recuerda a las fiestas escolares”, dice TSHA. “La niña, el niño, queriendo bailar. La gente que intenta verse demasiado cool y no quiere bailar, o la gente que quiere bailar, o la persona que baila como loca, están por todos lados y todos se ríen”.

“A Jacob le encantó la canción, pero pensé: ‘Escribí esta letra cuando tenía 19 años, ya no se siente como yo’”, explica TSHA. “Así que estaba tratando de pensar quién más funcionaría para la voz, quién podría transmitir ese ambiente descarado, británico y divertido. Estaba escuchando el material de Master Peace y pensé: ‘Estoy obsesionada. Este tipo es genial. Me encantó su actitud’”.

El resultado es otro momento destacado de energía optimista en lo que ya está demostrando ser uno de los álbumes del verano, después del lanzamiento de los sencillos “Girls (with Rose Grey)”; “Drive (with Ingrid Witt)” y “Sweet Devotion (with Caroline Byrne)”, que ha contado con amplio apoyo de medios como MTV, Billboard, Resident Advisor, NYLON, Mixmag, Clash, DJ Mag, Consequence, Wonderland, This Song Is Sick, PopMatters, Brownies & Lemonade y muchos más. TSHA también continúa su gira mundial este verano, incluyendo una serie de shows en Ibiza en lugares emblemáticos como DC10, Pikes y Ushuaïa, y conciertos en Norteamérica en Outside Lands y Brooklyn Mirage.

En Sad Girl, TSHA da la bienvenida a una nueva era, una en la que pone su propio sello vocal en las pistas y se acerca a los géneros que siempre quiso en lugar de buscar aprobación ajena. Más allá de mostrar solo los lados eufóricos o melancólicos de su personaje, TSHA lo muestra todo. Es un álbum que expresa que está bien estar triste, e incluso deleitarte en ello; después de todo, no puedes tener lo bueno sin lo malo.

Es el segundo LP de la estrella británica en ascenso y sigue a su álbum debut de 2022, Capricorn Sun, que se construyó sobre una base brillante y melódica de house, incorporando sensibilidades rave y garage del Reino Unido. El disco fue nombrado Álbum del Año por DJ Mag y BBC R1 Dance, mientras que la revista Music Tech nombró a TSHA Productora del Año, lo que significó mucho como productora cuyas habilidades frecuentemente se han pasado por alto. El hilo conductor de la música de TSHA está en su capacidad para transmitir emociones; tomemos, por ejemplo, la conmovedora “Sister”, que escribió durante el encierro de 2020 después de que descubrió que tenía una media hermana.

Todo esto ha resonado claramente: la música de TSHA ha obtenido más de 180 millones de reproducciones, además de que ha sido nominada a un MOBO como Best Dance Act y a un Grammy por su trabajo en la canción de Diplo “Let You Go”. A finales del año pasado, colaboró ​​con Ellie Goulding, después de que la estrella del pop le mandó un mensaje expresando que amaba su trabajo. El resultado fue “Somebody (with Gregory Porter)”, un emotivo shuffler con una portada inspirada en Let Go de Avril Lavigne. “Giving Up (with Mafro)” fue nombrada por Spotify como su cuarta mejor pista electrónica de 2022.

TSHA, ahora una superestrella en ascenso en el mundo de la electrónica, ha recibido elogios de la prensa de música dance, así como de revistas como Observer, Billboard e Interview. Ha aparecido en las portadas de Mixmag y DJ Mag. Además, tuvo una residencia en DC-10, presentó un BBC Essential Mix y más. Preparándose para aún más conciertos, incluyendo All Points East, Lost Village y encabezando shows en América del Norte y del Sur, Europa y más allá, no tiene intención de detenerse pronto.

Nada de esto es sorprendente, dado que TSHA ha estado dominando las pistas de baile durante un buen tiempo. Ha apoyado a artistas de alto calibre, como The Chemical Brothers, Flume y Fred Again… mientras da más de 100 conciertos al año. Su actual gira por Ibiza la ha visto repartiendo abanicos y camisetas adornadas con 'IBISHA' a multitudes sudorosas y agitadas.

Si bien encuentra alegría en el hedonismo y el escapismo, Sad Girl también es un álbum que aborda sentimientos difíciles. El interludio “Lonely Girl” canaliza su infancia aislada en la ciudad predominantemente blanca de Fareham, en Inglaterra, creando cuentos de hadas estilo The Secret Garden en su cabeza. “Green” fue escrita después de una discusión con su pareja, donde canta con franqueza (en el álbum debuta su voz por primera vez) sobre la positividad tóxica. TSHA puede irradiar confianza, sonriendo de oreja a oreja, en sus videos en redes sociales, pero también ha hablado abiertamente de sus batallas con la salud mental. La canción principal, “Sad Girl”, tiene una introducción hablada de Dan Whitlam, cuyo tema gira en torno a los sentimientos de soledad e infelicidad a pesar de estar rodeado de gente. Sin embargo, lo más importante es que Sad Girl ve a TSHA superando y dejando atrás estos desafíos.

Al igual que en sus lanzamientos anteriores, Sad Girl juega libremente con géneros musicales: TSHA es alguien con un conocimiento enciclopédico de la música y sus gustos personales van desde Pink Floyd hasta Caroline Polachek.

Aquí, ella se enfoca en su adolescencia (el título hace un guiño a los nombres de pantalla emo de MSN y los correos de Hotmail) y puedes escucharlo en el R&B dosmilero, rude electro y techno, que recuerda la agridulce angustia de la edad adulta temprana. En medio de fragmentos de quietud y reflexión, es un disco dance en esencia: los ritmos de discotecas calientes se embarran contra himnos hipnóticos y pop digno de MTV.

La inspiración para la portada surgió después de que, a los 21 años, TSHA soñó que estaba atrapada bajo el hielo. Ella estaba deprimida en ese momento y se imaginaba caminando sobre un lago helado que se agrietaba y caía al agua helada. Después de luchar por salir, cedió y se hundió hasta el fondo. Ese sueño se quedó grabado en su cabeza: lo vinculaba con sentir que en ese momento estaba luchando contra la vida. En la portada del álbum, ella logra salir del hielo y está posando sobre un iceberg, en una toma glamorosa inspirada en la fotografía de moda de Thierry Mugler de los años 80.